La
medicina convencional sigue catalogando a la diabetes tipo 2 como un problema
de azúcar en la sangre. Realmente tiene su origen en la resistencia a la insulina 1 y la mala señalización de la leptina, que es causada por altos
niveles crónicos de insulina y leptina. En otras palabras, es una enfermedad
que proviene de la alimentación.
Por
desgracia, como lo señaló el Dr. Abhinav Diwan, profesor asociado de medicina,
biología celular y fisiología en la Escuela de Medicina de la Universidad de
Washington en San Luis, Misuri:2 "En general, el concepto de revertir o
curar la diabetes... no es bien aceptado en el campo de la medicina. Ni
siquiera es un objetivo terapéutico cuando las personas comienzan a tratar la
enfermedad".
Esta
es la razón por la que el enfoque de la comunidad médica para el tratamiento de
la diabetes, que por lo general implica la administración de insulina, no está
yendo a ninguna parte. Tratar la diabetes tipo 2 con insulina es una de las
peores formas de hacerlo, e incluso en algunos casos puede conducir al
desarrollo de diabetes tipo 1 (dependiente de la insulina).
Los
médicos de formación convencional también continúan difundiendo información
nutricional severamente errónea (como recomendar una alimentación rica en
carbohidratos y el uso de endulzantes artificiales), que es otra razón más por
la que la diabetes tipo 2 se ha disparado a tales proporciones epidémicas.
La
mayoría de las personas están al borde de la diabetes
Se
estima que, en los Estados Unidos, 30.3 millones de personas —casi 1 de cada
1—, tiene diabetes tipo 2.3 Otros 84 millones de adultos —aproximadamente 1 de
cada 3— son prediabéticos.
La prediabetes 4 se define como una elevación de la glucosa en la sangre de más de
100 miligramos por decilitro (mg/dl) pero inferior a 125 mg/dl, que es cuando
se convierte formalmente en diabetes tipo 2.
Sin
embargo, cualquier nivel de azúcar en la sangre en ayunas que regularmente sea
superior a 90 mg/dl en realidad indica resistencia a la insulina, y la obra
fundamental del Dr. Joseph Kraft sugiere que de hecho el 80 % de las personas
en el país —8 de cada 10— son resistentes a la insulina,5 lo que significa que
se dirigen seriamente hacia el desarrollo de la diabetes.
Esa
es la mala noticia. El lado positivo es que la diabetes tipo 2 es reversible y
el tratamiento no le cuesta nada. De hecho, en realidad le ahorra mucho tiempo
y dinero. Me refiero al ayuno. Se ha demostrado que tanto el ayuno intermitente
como el ayuno más prolongado de solo agua revierten la diabetes tipo 2.
El
ayuno: una alternativa terapéutica a la insulina
Un
reciente reporte de una serie de casos 6,7 que fue publicado en BMJ Case Reports
por mi amigo el Dr. Jason Fung, detalla cómo se puede usar el ayuno como una
alternativa terapéutica para la diabetes tipo 2. Este emocionante informe
realmente obtuvo un sitio en la página principal de CNN en línea.8 Como lo
señalaron los autores, su artículo:
"…[D]demuestra
la efectividad del ayuno terapéutico para revertir la resistencia a la
insulina, lo que resulta en la suspensión de la terapia con insulina y al mismo
tiempo mantiene el control de los niveles de azúcar en la sangre.
Además,
estos pacientes pudieron perder cantidades significativas de peso corporal,
reducir la circunferencia de su cintura, así como disminuir sus niveles de
hemoglobina glicosilada".
Un
reporte de series de casos no es un estudio controlado; más bien, solo presenta
el historial de uno o más pacientes y podría proponer una hipótesis de por qué
un tratamiento funcionó o no. En este caso, 3 pacientes con diabetes entre las
edades de 40 y 67 años participaron en un régimen supervisado de ayuno con el
fin de evaluar los efectos en sus requerimientos de insulina.
Los
pacientes habían sido diagnosticados con diabetes tipo 2 durante 10, 20 y 25
años respectivamente, y consumían insulina todos los días.
De
los tres pacientes, dos alternaron ayunos de 24 horas, mientras que uno ayunó
durante 24 horas tres veces a la semana durante un período de varios meses. En
los días de ayuno, se les permitía beber cantidades ilimitadas de líquidos
bajos en calorías como agua, café, té y caldo de huesos, y cenar pocas calorías
y carbohidratos.
En
los días sin ayuno, se les permitía almorzar y cenar, pero todas sus comidas
eran bajas en azúcar y carbohidratos refinados. El manual completo del régimen
de ayuno que se utilizó se describe en el libro de Fung, titulado The Complete
Guide to Fasting (La guía completa para el ayuno).9
Dos
de los pacientes pudieron suspender todos sus medicamentos para la diabetes,
mientras que el tercero logró dejar tres de sus cuatro medicamentos. Además,
los tres perdieron entre el 10 % y 18 % de su peso corporal. Según lo informado
por los autores:
"En
nuestro estudio, los tres pacientes eliminaron la necesidad de insulina al
iniciar un régimen terapéutico de ayuno. Los tres pacientes tuvieron éxito en
un periodo de un mes y uno de ellos lo logró en tan solo cinco días.
Además,
todos los pacientes mejoraron en varios otros indicadores de resultados de
salud clínicamente significativas, como la HbA1C, índice de masa corporal y
circunferencia de la cintura...
Como
tal, los pacientes con DT2 pueden revertir sus enfermedades sin preocuparse por
los efectos secundarios y la carga financiera de muchos productos
farmacéuticos, así como los riesgos desconocidos a largo plazo y la
incertidumbre de la cirugía, todo mediante el ayuno terapéutico".
En
otro ensayo similar 10 con la participación de personas con diabetes tipo 2, se
les brindó una alimentación severamente limitada en calorías, en la que
consumieron solo 600 calorías al día durante ocho semanas.
Al
final de su ayuno, todos estaban libres de la enfermedad, y tres meses después,
luego de haber retomado su alimentación regular, siete de los 11 participantes
seguían sin diabetes.
¿Por
qué el ayuno es una intervención tan poderosa para la diabetes?
Fung
es un nefrólogo (especialista en riñones) con su clínica en Toronto. Hace dos
años, lo entrevisté sobre el ayuno, que es una de las intervenciones más
poderosas que conozco para abordar la diabetes tipo 2 y la resistencia a la
insulina. Fung también fue uno de los expertos que revisaron mi libro titulado
Contra el cáncer, en el cual se integra parte de su trabajo.
En
última instancia, la diabetes solo es un síntoma de la resistencia a la
insulina, que es el problema subyacente.
La
resistencia a la insulina, que resulta en una disfunción mitocondrial, también
es una causa subyacente del cáncer, enfermedades cardíacas, Alzheimer y otras
enfermedades degenerativas, y todo comienza porque el cuerpo no puede quemar
grasa como su combustible principal.
Cuando
el cuerpo depende principalmente del azúcar, se generan más especies reactivas
de oxígeno (ROS, por sus siglas en inglés), que dañan las mitocondrias de las
células. El ayuno regula en gran medida la autofagia y mitofagia de forma
positiva, y estimula la biosíntesis mitocondrial durante la fase de
realimentación, lo que permite que su cuerpo se regenere de manera natural.
De
hecho, la investigación 11 publicada el año pasado demostró que el ayuno parcial
en realidad ayuda a regenerar el páncreas, al promover la generación de células
beta que producen insulina, las cuales son células que detectan el azúcar en la
sangre y liberan insulina si los niveles sanguíneos de azúcar aumentan
demasiado.
Por
medio de este efecto restaurador en el páncreas, la alimentación que imita el
ayuno también revirtió los síntomas de la diabetes en ratones. Valter Longo,
Ph.D., profesor de gerontología y ciencias biológicas y director del USC
Longevity Institute, dirigió el estudio y explicó los resultados:12
"Nuestra
conclusión es que incitar a los ratones a un estado extremo y después
revertirlo —al inducir la inanición y luego alimentarlos nuevamente— las
células del páncreas se activan para usar algún tipo de reprogramación del
desarrollo que reconstruye la parte del órgano que ya no está funcionando...
Médicamente,
estos hallazgos pueden ser muy importantes porque hemos demostrado —al menos en
modelos de ratón— que puede usar la alimentación para revertir los síntomas de
la diabetes.
Desde
el punto de vista científico, los hallazgos quizás sean aún más importantes
porque hemos demostrado que puede usar la alimentación para reprogramar las
células sin tener que realizar alteraciones genéticas".
El
origen de la diabetes tipo 2 es el exceso de azúcar en su alimentación
Una
vez que comprenda lo que realmente es la resistencia a la insulina y la
diabetes tipo 2, entenderá por qué algo tan simple como abstenerse de comer
durante un período de tiempo puede ser una intervención tan poderosa.
A
diferencia de las enfermedades infecciosas, no es posible tratar la enfermedad
metabólica por medio de medicamentos ya que las enfermedades metabólicas —como
la diabetes— tienen su origen en el estilo de vida, sobre todo en la
alimentación. Como fue explicado por Fung:13
"Debe
emplear tratamientos metabólicos, por eso es tan importante usar la grasa como
combustible... Recuerde, la glucosa ingresa a la célula y la resistencia a la
insulina ocurre cuando la glucosa no sale de la célula. De modo que durante
años hemos usado el paradigma de la cerradura.
Es
decir, la célula se encuentra cerrada. Fuera de la célula hay sangre, y cuando
la insulina aparece, la llave da vuela, abre la puerta y entra la glucosa.
Entonces, si hay insulina, ¿por qué no entra la glucosa?... Podría medir la
insulina y el nivel reflejado sería alto. Puede observar el receptor de
insulina, es decir, la puerta, que parece completamente normal.
De
esta manera [la medicina convencional] concluyó: 'Bueno, tal vez haya algo que
esté afectando al mecanismo. Hay algo atascado en la cerradura que no permite
que se abra correctamente, por lo tanto, la glucosa no puede ingresar a la
célula.
Hay
un gran problema con este tipo de paradigma, porque si eso sucede, la célula no
tiene glucosa y debe estar muriendo de hambre.
Perdería
mucho peso; tendría un hígado muy delgado. Toda su grasa desaparecería, porque
si lo piensa, en la diabetes tipo 1 sin tratar, donde no obtiene suficiente
insulina, eso es exactamente lo que ocurre. La célula literalmente se muere de
hambre y todo se deteriora... Pero eso no es lo que está sucediendo en este
caso.
En
la diabetes tipo 2, por lo general se observa a personas con obesidad y abdomen
amplio... En este caso, lo que en realidad ocurre es un síndrome de saturación.
La célula no puede aceptar más glucosa porque ya está repleta de la misma.
Esa
es la razón por la que padece resistencia a la insulina. La insulina está
tratando de llevar glucosa a la célula, pero la célula se encuentra llena...
Entonces, en realidad, es un mecanismo de saturación...
También
es la razón por la que su hígado está lleno, es un gran hígado graso. El hígado
está ocupado tratando de deshacerse de toda esa glucosa convirtiéndola en
grasa... Ahora, si la diabetes tipo 2 y la resistencia a la insulina son lo
mismo, en realidad se trata de una cantidad elevada de azúcar. Esa es la
conclusión.
Y
si entiende que todo el problema es el exceso azúcar, entonces la solución es
no usar más insulina para llevar más glucosa a una célula que ya se encuentra
llena. La clave es deshacerse de todo. Entonces, lo que debe hacer es: 1) No
ingresar más azúcar en su sistema, porque ya tiene demasiada y 2)
quemarla".
Por
qué la terapia con insulina podría causar más perjuicio que beneficio
Ahora
bien, cuando toma insulina, la insulina añadida le permite a su cuerpo usar más
de ese exceso de glucosa, pero la convierte en grasa.
Esta
es la razón por la que la mayoría de las personas con diabetes que toman
insulina terminan subiendo de peso, que es exactamente lo opuesto a un progreso
saludable, ya que cuanto más peso aumenta, más empeora su diabetes y más
insulina necesita.
Como
lo señaló Fung, este tratamiento resulta ilógico ya que las personas con
diabetes ya tienen altos niveles de insulina.
"[¿Por
qué añadirle] más insulina a una situación en la que ya posee demasiada
insulina? A una persona con hipertiroidismo, no se le administra más hormona
tiroidea.
A
un alcohólico, no le da más alcohol. Es exactamente lo que no debe hacer. De
hecho, si sus niveles de insulina son demasiado altos y esa es su enfermedad,
necesita disminuir la insulina. Al administrar insulina, en realidad está
empeorando el problema principal", dice.
La investigación 14 también ha confirmado que la terapia con insulina no aumenta
significativamente la esperanza y calidad de vida. Según informó el sitio web
"Medical News Today":15
"Estiman
que una persona con diabetes tipo 2 que comienza la terapia con insulina a los
45 años —y reduce un 1 % sus niveles de hemoglobina A1c— puede experimentar 10
meses adicionales de vida saludable.
Pero
en un paciente que comienza un tratamiento para la diabetes tipo 2 a la edad de
75 años, estiman que la terapia solo puede brindarle tres semanas adicionales
de vida saludable. Los investigadores dicen que esto hace que se plantee la
pregunta: ¿valen la pena 10 a 15 años de pastillas o inyecciones con posibles
efectos secundarios?"
Para
algunos, el tratamiento con insulina puede promover la progresión rápida de la
enfermedad
Un
posible efecto secundario realmente significativo de la terapia con insulina es
la progresión de la diabetes reversible a irreversible. Esto se demostró en un
estudio de 201416 que fue publicado en el Journal of Clinical Endocrinology
& Metabolism.
El
estudio encontró que la administración de insulina transgénica recombinante
—que es el tipo que se suele utilizar— en personas con diabetes tipo 2 con cierta
susceptibilidad genética, puede hacer que sus cuerpos produzcan anticuerpos que
destruyen sus células productoras de insulina (células de los islotes
pancreáticos).
Básicamente
desencadena una respuesta de enfermedad autoinmune, lo que provoca que padezca
diabetes tipo 1 y 2 simultáneamente. El tiempo promedio de aparición de la
diabetes tipo 1 fue de 7.7 meses. Un participante del estudio desarrolló
diabetes tipo 1 en poco más de un mes.
De
acuerdo con los autores, el grave deterioro del control de la glucosa en la
sangre después de recibir insulina es una señal de advertencia de este
problemático efecto secundario. De acuerdo con este estudio, los genes que lo
predisponen a esta respuesta autoinmune a la insulina son:
Se
cree que los HLA clase II de alto riesgo de diabetes tipo 1 (IDDM1), desempeñan
un papel en cerca de la mitad de todos los casos de diabetes tipo 1, y
El
genotipo VNTR (IDDM2), que se cree que predispone a la diabetes tipo 2
El tratamiento con
insulina aumenta el riesgo de varias complicaciones
Además,
un estudio realizado en 201317 encontró que tratar la diabetes tipo 2 con
insulina duplicó con creces el riesgo de mortalidad por todas las causas en los
pacientes. También conduce a:
Dos
veces más infartos de miocardio
1.4
veces más derrames cerebrales
2.1
veces más neuropatías
1.4
veces más probabilidades de cáncer
1.7
veces más incidentes cardíacos graves
3.5
veces más complicaciones renales
1.2
veces más complicaciones oculares
2.2
veces más propenso a la muerte
Un
estudio que fue publicado en la revista Diabetologia 18 en el 2014 también
encontró que los pacientes con diabetes y cáncer tienen un riesgo de muerte
significativamente elevado.
Los
pacientes con diabetes que usaban insulina en el momento de su diagnóstico de
cáncer tuvieron una tasa de mortalidad cuatro veces mayor un año después del
diagnóstico de cáncer en comparación con los pacientes sin diabetes, o aquellos
que no tomaban insulina para controlar la enfermedad.
Aunque
fue un estudio observacional, lo que significa que no puede establecerse una
causalidad, los resultados siguen siendo dignos de mencionar.
Otros
medicamentos para la diabetes también plantean riesgos. Por ejemplo, el Avandia
se ha relacionado con un riesgo 43 % mayor de ataque cardíaco y 64 % de muerte
cardiovascular, en comparación con otros tratamientos.
Por
lo tanto, es muy importante comprender que la diabetes tipo 2 se controla mejor
mediante la restauración de la sensibilidad a la insulina y leptina, y esto es
precisamente lo que hace el ayuno. También reducirá drásticamente su riesgo de
diabetes al:
•
Limitar los granos y azúcares en su alimentación y consumir suficientes grasas
saludables alimenticias, incluido la omega-3 de origen animal
•
Hacer ejercicio con regularidad 19
•
Obtener suficiente sueño reparador — En un estudio de 10 años de duración 20 de 70.000 mujeres sin diabetes, las mujeres que dormían menos de cinco horas o más
de nueve por noche tenían 34 % más probabilidades de desarrollar síntomas de
diabetes que las que dormían de siete a ocho horas por noche
•
Optimizar su nivel de vitamina D a entre 60 y 80 ng/mL
•
Optimizar su nivel de magnesio — El magnesio desempeña un papel importante en
la homeostasis de la glucosa e insulina 21 y se requiere para activar la tirosina
quinasa, una enzima necesaria para el correcto funcionamiento de los receptores
de insulina 22
Un
estudio de 2013 realizado con la participación de personas con prediabetes
encontró que la mayoría consumía cantidades inadecuadas de magnesio, y aquellos
con el mayor consumo de magnesio redujeron en un sorprendente 71 % su riesgo de
azúcar en la sangre y problemas metabólicos 23
Si
está tomando algún medicamento acuda con un médico experto
Si
bien el ayuno es una intervención profundamente efectiva para tratar la
diabetes tipo 2, debe tener cuidado si padece diabetes. En caso de tomar
medicamentos, sobre todo para el azúcar en la sangre, debe asegurarse de hablar
con su médico porque existe el riesgo de que sus niveles de azúcar en la sangre
terminen bajando demasiado.
Si
está tomando insulina y sigue tomándola mientras ayuna, podría desarrollar
problemas. Por lo tanto, es importante monitorear sus niveles de azúcar en la
sangre y ajustar su medicación como corresponda. Como se señaló anteriormente
por Fung:
"Recuerde,
el ayuno reducirá sus niveles de azúcar en la sangre, y su insulina o los
medicamentos disminuyen sus niveles de azúcar en la sangre, por lo que habrá
una especie de dos mecanismos reduciendo sus niveles de azúcar en la sangre.
Bajar
los niveles de forma repentina puede ocasionar convulsiones, hacer que termine
en urgencias y sin duda podría causar la muerte. Y esa es una de las cosas de
las que deben tener mucho cuidado. Así que sí, puede hacerlo, pero debe
asegurarse de que sea en un entorno supervisado con alguien experto en el
tema".
El
ayuno parcial periódico es clave para el bienestar y la salud en general
Al
regular la autofagia y mitofagia, estimular la biosíntesis mitocondrial y
desencadenar la regeneración de células madre, el ayuno parcial (con días de
300 a 700 calorías con base en la masa corporal magra) no solo es beneficioso
para abordar la diabetes tipo 2 y obesidad, sino también para su salud en
general y probablemente incluso para la longevidad.
De
hecho, hay evidencia que sugiere que el ayuno puede ayudar a prevenir o hasta
revertir la demencia, ya que le ayuda a su cuerpo a desechar los residuos
tóxicos.
Al
disminuir la insulina, también aumenta otras hormonas importantes, como la
hormona del crecimiento (también conocida como la hormona de la aptitud), que
es importante para el desarrollo muscular y la vitalidad general.
Como
Fung señaló anteriormente, el ayuno es "sin duda alguna una de las claves
del bienestar". Otras afecciones que pueden beneficiarse del ayuno incluyen
los ovarios poliquísticos, riñones poliquísticos y las células cancerosas de
rápido crecimiento.
La
razón es que cuando aumenta la autofagia, el organismo comienza a descomponer
las proteínas viejas, incluidas las células de rápido crecimiento. Posteriormente,
durante la fase de realimentación, la hormona del crecimiento aumenta, lo que
incrementa la reconstrucción de nuevas células y proteínas. Es decir, reactiva
y acelera el ciclo de renovación natural de su cuerpo.